Cuenta la leyenda que una joven campesina ofreció al joven Rey Jaime I de Aragón una bebida blanca y dulce. El rey al probarla quedó fascinado por su sabor y le preguntó a la muchacha: “Això què és?” (¿Qué es esto?). La joven le explicó: “Això és llet de xufa” (Eso es leche de chufa). El joven rey le replicó: “Això no és llet, això és OR XATA!!!!” (Esto no es leche, esto es ORO, guapa!!!)
Leyenda o no, algunos atribuyen su nombre a ese comentario del Rey a la joven campesina “Això és OR, XATA!!!”. Pero lo que sí es cierto es que la horchata (orxata) es una bebida elaborada a base de chufas: un tubérculo cuyo origen se remonta a la civilización egipcia, habiéndose encontrado restos de él en tumbas y sarcófagos. El cultivo de la chufa se fue expandiendo desde Egipto hacia el Norte de África llegando a la Península Ibérica con la conquista musulmana. Probablemente se cultivo se extendió debido a la prohibición por parte de la religión musulmana de no poder beber vino u otra bebida alcohólica y, posteriormente se mantuvo, en gran parte, debido a las propiedades medicinales que la tradición popular valenciana le atribuye a las chufas, pues es un gran remedio contra los trastornos diarréicos.
- Dificultad: Fácil
- Tiempo: 30 minutos + 1 hora de refrigerado
- Porciones: 2 litros
Ingredientes para 2’5 litros de horchata.
- 500 gr. de chufas de valencia
- 1 cucharadita de canela
- ralladura de 1⁄2 limón
- 80 gr. por litro de azúcar integral o edulcorante al gusto.
- 2 litros de agua mineral
Procedimiento
- Limpiar bien las chufas para eliminar las impurezas. Lo mejor es hacerlo con un poco de lejía para uso alimentario, eliminando así mismo los tubérculos defectuosos, es decir, los que flotan cuando se les pone a remojo. Lavar varias veces hasta que el agua salga completamente limpia.
- Hidratar las chufas secas con agua durante unas 8 horas.
- Pasado ese tiempo escurrir bien y triturar con una batidora potente -yo lo hago con la Thermomix, pero puede ser con cualquier robot de cocina o batidora- añadiendo medio litro de los 2 litros de agua mineral, la canela y la ralladura de limón.
- De la pasta resultante exprimir todo lo que se pueda el jugo con una gasa o trapo nuevo en un cazo alto o olla.
- Cuando ya no salga más jugo retirar la pulpa del trapo y lo guardaremos en un recipiente. No tirar ya que esa pulpa la podemos secar en el horno y utilizarla como harina de chufa.
- Repetiremos la operación las veces que sea necesario hasta acabar con toda la pasta de chufa.
- Añadiremos el resto de agua mineral y el edulcorante que queramos. Yo usé azúcar integral triturado previamente en la Thermomix para que se disuelva mejor. No obstante se puede utilizar el edulcorante que más os guste según la dosificación de cada uno de ellos. Tener en cuenta que si usáis miel su sabor también condicionará el resultado final de la horchata, igual pasa con el sirope de ágave o arce, por el contrario su preferís azúcar panela o de coco tened en cuenta que su color se verá sustancialmente oscurecido.
- Refrigerar inmediatamente al menos durante 1 hora y consumir en 24 horas.
Utensilios:
- Batidora o procesadora de alimentos (Thermomix)
- Espátula de silicona
- Gasa nueva
- Báscula
- Olla o cazo alto
- Recipiente hermético
- Botellas de cristal o jarra esterilizada
Tips
La horchata es un producto que, al hacerse a partir de un tubérculo, hay que limpiarlo bien para que el jugo resultante esté lo más libre posible de impurezas y bacterias, de ahí que haya que lavar bien las chufas e incluso utilizar lejía apta para uso alimentario. No obstante al hacerlo en casa la eliminación total de dichos residuos es prácticamente imposible, por lo que debemos tener en cuenta que su conservación en nevera será muy corta durando escasamente 24 horas. Es por ello que para que no nos salga un moco en la superficie y, poco a poco, se vaya espesando, teniendo una consistencia extraña debido al sobrecrecimiento de las bacterias no eliminadas, es mejor que la metamos en el congelador si no la consumimos el día que la hagamos. La congelación nos permite conservar durante más tiempo nuestra horchata, puesto que ralentiza ese crecimiento de bacterias, por lo que aún así debemos consumirla antes del mes de su almacenamiento. Cuando queramos tomar horchata sólo debemos descongelarla en nevera o incluso triturarla con la Thermomix o batidora para obtener un granizado, igual de bueno que en forma líquida.
También es ideal que la botella de cristal donde vayamos a conservar nuestra horchata esté esterilizada, así también evitaremos que el crecimiento de bacterias sea más rápido.
Para esterilizar cualquier tarro de cristal lo que debemos hacer es poner una olla lo suficientemente grande como para que quepan enteros todos los recipientes a esterilizar, llenar de agua completamente hasta cubrirlos completamente y llevar a ebullición durante 30 minutos. Debemos meter también la tapas de los tarros o recipientes si los tienen. Como apunte a tener en cuenta debemos cerciorarnos que los botes no tengan pegatinas o etiquetas y que las tapas no tengan un disco de plástico o cartón. Pasada la media hora retirar los frascos con unas pinzas y dejarlos sobre una bandeja cubierta con papel de cocina.
El dulzor de la horchata casera es algo que controlamos nosotros, yo os he puesto una cantidad aproximada pero debéis ser vosotros los que probando la horchata determinéis cual es vuestro punto de dulzor ideal. Realmente la cantidad de azúcar que pongo es un poco a ojo y lo que hago muchas veces es refrigerarla sin nada de azúcar para que luego cada uno se ponga el azúcar o edulcorante al gusto. Por otra parte si la chufa es buena no le hace falta ningún tipo de edulcorante porque ya es bastante dulce por sí sola, no obstante eso viene determinado por el gusto de cada uno.
Espero que os animéis a hacerla, más que nada porque nada tiene que ver con la de compra en cuanto a sabor y mucho más digestiva. En fin a mi la casera me sienta genial, en cambio la de compra no la puedo ni tomar.
Y ya sabéis si las hacéis y tenéis alguna duda o hay algo que no os queda claro me lo decís para que lo pueda solucionar, porque desde Mossets de Plaer trabajamos para que las recetas salgan a la primera.
Y si las hacéis y os salen perfectamente, también me lo comentáis, así sabré que voy por muy buen camino, y seguro que me inspiráis con vuestras elaboraciones.
Besitos, Belén